La semana pasada fui a la fiesta del reencuentro de la Promoción de Las Esclavas de 1991. 20 años… que no se fuman en pipa ni pasan en balde…
Yo que nunca fui la más amiguera en el colegio (siempre me pareció una etapa en la vida que, como el aceite de ricino, uno se la tiene que tragar y punto), me alegró muchísimo encontrarme con las que fueron y, ahora, disfruto más que nadie el chat de BBM que se ha creado donde me divierto a horrores y tengo más contacto y comunicación con mis antiguas compañeras de la que jamás tuve en la escuela ¡Qué viva la tecnología y las redes sociales!
Y, es que en 20 años que han pasado, a todas les ha dado la vida para mucho.
Las hay casadas, en primeras o segundas nupcias (no llegué a averiguar si alguien en terceras pero, si Elisabeth Taylor se mandó siete, no veo porque alguna no pueda seguirle los pasos).Están las juntadas y recién divorciadas y, también, alguna que se separó para arreglarse de nuevo con el marido. También las hay felizmente solteras y solteras buscando dejar de serlo. En un solo lugar todas las posibles combinaciones. Para muestra un botón, o un montón de botones, claro.
En el tema de los hijos el asunto es de lo más variopinto. Hay algunas con hijos adolescentes y otras, como yo, casi que recién nacidos. Muchas propios, otras asumidos de sus parejas, algunas con pocos y otra hasta con tres de un solo golpe. Las que aún buscan, con o sin pareja, y las que ya cerraron fábrica con candado y a puerta soldada.
En profesiones esta promoción ha dado para todo: Abogadas a dos manos, alguna doctora, comerciantes con empresas propias o ajenas, ejecutivas de todo tipo, publicistas, mercadeo, ventas… trabajadoras para multinacionales y las que se fueron al campo e, igual de válido, las que son administradoras del hogar que, al final, ¡éstas trabajan bien duro!
El tiempo pasa para todas y, aunque algunas lo llevan mejor que otras, en general puedo decir que no había gran cambio y que, en la mayoría de los casos, se ven mejor que hace veinte años. Por supuesto que hay que anotar que la moda de finales de los 80’s no era la más favorecedora. En contraste con las permanentes, las galluzas de ola tipo Alf, y los pelos tizados hasta reventar el descubrimiento de la chocoterapia ha hecho maravillas en nuestros looks. Lo que son las libras han ido y venido, casi todas están más flacas, aunque no faltaron las que se han dejado arropar por la grasita un poco. Y están los cambios de color, peli oscuras que ahora son fulas, fulas que ahora son más platino tipo Marilyn Monroe, peli negras a castañas, y cabellos negros azabache, poca cana vi así que, digámonos la verdad, todas hacen mano del tinte de una manera u otra. También, todo hay que decirlo, está el caso de un par de narices y varias tetas por obra y gracia del cirujano plástico que ¡hasta que dan ganas de pasar por quirófano también!
En fin, si bien a algunas las he seguido viendo a través de los años, con mayor o menor contacto, las hay que no veía en veinte años (también las que vi que aun no sé quiénes son) y, de repente, gracias al chat, mantenemos contacto diario. Bueno y acertado resulta ser el lema de las Esclavas ¡FIELES HASTA EL FIN!
Hola Paola! Me encanta tu blog! Desde hace un par de meses lo encontre por casualidad y he lo he leido mucho. Me fascina tu manera de escribir.. Bella familia y preciosas ninas! Un abrazo
hola Yexa, gracias por tus comentarios y me encanta que te gueste el bolg!!! un abrazo! p.-