Es cierto que existen algunas excepciones pero, la verdad sea dicha, gran parte de los que son miserables en Navidad lo son ¡PORQUE QUIEREN! ¿Ah? ¿Por qué digo esto?
Las cenas navideñas pueden llegar a ser un circo pero a mi me hace gracia el espectáculo. Está el que va con gorro de Santa Claus y corbata a juego, las mujeres de rojo riguroso, los tíos que no ves en todo el año, los adolescentes enfurruñados en una esquina pegados al Iphone, la tía que se pasa de copas y se pone «de lo más contenta», el que no le gusta nada de lo que se sirve y se repulsa ante el lechón despatarrado en la mesa con manzana en la boca, quien cuenta las mismas historias tooodas las navidades y así.
No falta el que está de los nervios porque se estresa hasta la médula por cualquier pendejada, los niños corrincheando bajo las mesas y cogiendo rabietas apenas se pasan de hora, el perro -o el gato- que no hay quien controle, en fin, que ninguna cena es perfecta pero justamente uno debe aprender a gozar esas cosas, igualito como si fuera el show de Disney que soló tiene una presentación al año, porque más surrealista que una cena navideña sólo Alicia en el Pais de las Maravillas y esa es una historia encantadora ¿o no? también es cierto que no es una historia para todo el mundo…
Pero no hay nada más pesado que cuanto sueltan a la realeza del drama. Aquel que llega Navidad y tiene que ser quien monte el numerito armando pelea, insultando al primo o sacarle un rollo mal resuelto a sus padres. Hasta los que toman por sorpresa a todo el mundo escupiendo a gritos y lagrimas un resentimiento que se lo estaban comiendo solitos porque nadie sabía de él.
Están los que hasta hacen listas de por qué no pueden ser felices en Navidad. Que si hace tres meses casi se ganan la lotería pero no… Que no tienen pareja… Que deciden ese día revaluar toda su relación sentimental que no es perfecta… Que esta Navidad los hijos la pasan con su expareja… Que tuvieron un perro que se vestía de rojo en Navidad pero se murió hace dos años… Que no hay nieve… Que la mitad de su familia no se lleva con la otra… Que su familia no está… Que están saturados de familia… Toma el mismo tiempo y esfuerzo hacer una lista de las cosas por las que SI ser feliz en estas fechas y te pone en actitud de celebración ¡en seguida!
Ser feliz es una opción pero ser Feliz por un día, caramba ¡no es pedir que lluevan manzanas!. Mi familia no difiere de las otras ni en lo bueno ni en lo malo. ¿Creen que yo no tengo a un par de familiares a los que les daría con un jarrón en la cabeza? Por supuesto que sí. ¿Creen que si me pongo a hacer lista no tengo para llorar dos días? Pues también. Pero pasar una Navidad Feliz ES UNA OPCION
Yo soy una feliz entusiasta de la Navidad porque abrazo, acepto y disfruto saber que está bajo mi control y YO decido ser feliz esa noche. También hace tiempo que hice las paces con las expectativas. Acepto a la gente, eso incluye a mi familia y otros adjuntos, por quienes son, no por como quisiera que fueran. No tengo cuentos o noches ideales prefabricadas en la cabeza sobre lo que debiera ser la Navidad como suelen vendérnosla en el comercial de Coca-Cola y está lejos de la realidad.
Me acepto y me quiero como soy, con mis chistes subidos de tono, mis salidas «crudas» y mis comentarios imprudentes. Me relajo porque sé que no voy a caerle bien a todo el mundo y ¿qué le vamos a hacer? Tampoco los demás van a caerme bien en todo momento y está bien conmigo como está bien con ellos. De aquellos que no me caen bien en ningún momento, o tengo problemas para aceptarlos como son: me alejo. ¿Y de aquellos que me caen bien pero son un plomo para las navidades?… Pues les tomo distancia en este tiempo porque, para nadar contra corriente, con los salmones basta.
Se disfruta la Navidad celebrándola tanto como protegiéndote. Toma distancia de todo lo que te huela a reyes del drama y sumérgete en las tradiciones gratificantes, aquí te comparto algunas de las que yo apliqué para subirme el Espíritu Navideño…
El Arbol de Navidad
En mi casa la Navidad entra oficialmente cuando ponemos el árbol, que sea de verdad, que huela a pino y que deje la casa llena de sus hojas pinchosas. Lo compramos y ponemos con las niñas -con lo que todos los adornos quedan de un metro para abajo pero luego yo lo acomodo-. Gozamos todo el proceso, desde comprarlo en Gago y atiborrarnos de jamón mientras lo enfundan, como ver al papá haciendo equilibrio sobre la escalera para poner la estrella y enchufar metros de lucecitas que nunca cumplen dos navidades, hasta poner adornos que de tanto manoseo toca jubilar la mitad en enero. Ahora lo pongo con las niñas y de soltera lo puse solita en mi casa por años. Las noches con el arbolito prendido son más lindas, digo yo…
El Espíritu Navideño Jo-Jo-Jo
Para las fechas así como es mejor huirle a los grinch es estupendo acercarte a los que están dispuestos a ambientarse total con las fechas. ¡Ah! y que no falten las estrellitas para los niños (y los mayores) ¿no son estupendas? pocas cosas sacan tanto la niña en mi como las estrellitas
El Elfo
Este cayó en nuestra casa de regalo. La libreria StoryTime nos mandó uno a casa y venía en una caja con su leyenda y el Elfo. Yo lo descubrí esta Navidad pero mis hijas esperan contar con él por muchas más.
Según la historia, el Elfo llega a tu casa la noche después de Acción de Gracias y aparece en algún sitio de la casa. La primera vez que lo hace debes ponerle un nombre de tu elección. El Elfo tiene poderes mágicos y todas las noches viaja hasta el polo norte para darle un reporte a Santa de como se portan los niños de la casa (es una genial manera de extorsión les cuento). A la mañana siguiente aparece en un sitio diferente y los niños deben buscarlo al despertarse pero, la condición, es que no lo toquen porque si lo hacen perdería sus poderes mágicos para viajar en las noches donde Santa y volver. Para evitar problemas nuestro elfo, al que las niñas llamaron Daniel, amanecía colgado de lamparas, esculturas y lugares fuera de alcance de Ana.
Las niñas han gozado mucho la tradición y se despidieron de Daniel la noche del 24, puesto que el Elfo se va en el trineo cuando Santa pasa por la casa y vuelve al año siguiente.
La Felicitación «Oficial»
Puede ser una foto estupenda como está que nos hizo Yolanda Vicente o una espontánea de la familia, y hasta tuya con tu perro o sola con bincha de cascabeles -¡qué sé yo! ponte creativa- pero es de lo más simpática enviársela a todos tu amigos, sea impresa, por e-mail y hasta wassap y recibir tantas respuestas y felicitaciones de regreso.
Los Regalos
Para mí lo lindo de regalar es pensar en la otra persona, ponerte en su piel y sus zapatos y conseguirle algo que sabes que le gustará (o por lo menos tú crees que será así). Sabes que lo has conseguido al ver su cara al abrirlo, has acertado porque no hay a quien no le brillen los ojos cuando es sorprendido gratamente (si no hay reacción probablemente la cagaste pero el próximo año tendrás otra oportunidad) y no necesitas tener a tu familia y amigos más querido junto a ti para hacer regalos, siempre hay alguien cerca en quien pensar y quien se alegrará que le regales algo.
Ahora, para los que somos padres de niños pequeños, las mañanas del 25 de diciembre bajo el árbol son un tesoro. La cara de recién despertados y alegría de los niños ante los regalos del Niño Jesús no tiene precio (sí, el Niño Jesús los manda y Santa los reparte)
Los Niños
Si quieres pasar una feliz Navidad rodéate de niños en estas fechas. Tuyos, tus sobrinos o nietos, del vecino, de la comunidad, de la Iglesia o puedes ir a un orfanato y ser parte de una Navidad acompañado de niños, no hay excusa. No hay nada que levante el Espíritu Navideño como los niños, que agradecen igual una bicicleta que una caja de chocolates.
En fin, ya te he dado ideas para levantarte en ánimo y las ganas de pasar una Feliz Navidad por todos los años que te quedan por venir. Recuerda que la celebración es tanto de festejar como de protegerte de las personas y situaciones con malas vibras.
Sobretodo recuerda que LA CLAVE para pasar unas Navidades Felices… ¡¡ES QUE SEA TU ELECCION!! …¡Tú tienes el control! ¿no es fantástico?
P.D. Gracias a la familia Barría-Pino que nos recibe siempre en su cena del 24 de Diciembre, unas cenas navideñas encantadoras y sin ningún drama ¡como a mí me gustan!
Cada quien disfruta la tradicion como la construido a lo largo de su vida o como la construyo en su infancia.
Diciembre me gusto pa que te vayas dice la rola de Jose Alfredo.
Mi experiencia clinica…o…cinica…me comprueba que en esta epoca de diciembre todos viven los duelos no elaborados por separaciones, resentimientos, envidias, celos y un largo etc de infelicidad y otros resabios. He aprendido en mi soledad a estar bien conmigo mismo y convertir la cena, si se ofrece, en artilugio de amores intimos y camaraderias cercanas independiente de lo que hagan o murmuren los que no han aprendido a elaborar sus duelos.
De acuerdo contigo Jose Manuel!! Uno decide como quiere pasarlo y que rollos de otros no vas dejar q te arrastren!!
Que tengas un feliz año nuevo y gracias por escribir!!
Un abrazo, p.-