La JMJ Panamá fue hace solo dos semanas pero al mismo tiempo pareciera hace un mundo así que dudé: ¿escribo sobre eso o ya es pan viejo?
Y hoy un amigo me dice, «seguí tus redes y se siente una visión diferente como tú viviste la JMJ» y me dije, quiero que este recuerdo y escrito quede.
Así que aquí estoy, contándote como viví yo la JMJ Panamá porque tuve la visión de católica renovada, de peregrina, de casa de acogida, de ciudadana -que-se-quedó-y-particpó y de reconexión con mi Iglesia.
Voy a contarte como la viví externamente con todo lo que pasó a mi alrededor esos días, pero también voy a contarte una historia muy intima, muy arraigada desde las horas más oscuras y qué ocurrió dentro de mí en estos días de la JMJ.
Pero primero lo primero y comenzaré diciéndote que fui creyente fiel de la JMJ Panamá desde el primer día, frente al montón de haters y verdaderos grinches que salieron a quejarse y corrían como gallinas sin cabeza en absoluto pánico colectivo comprando papel higiénico y agua y desabasteciendo el Cosco como si vinieran ordas y como si este país no hubiera sido militarmente invadido sin previo aviso y salimos adelante.
Siempre estuve convencida de las bendiciones que iba a traer y aun así, me asombré de mi Panamá, de la transformación de la gente, fue alucinante ser testigo y vivir como se volcó todo el mundo y se unió al ambiente de alegría y buena vibra, de como sinagogas, mezquitas y miles de personas de diferente credo y opinión dieron la cálida bienvenida.
Asombroso el orden, organización, decencia y amabilidad que desbordaba todo el mundo.
Esto parecía como vivir en las nubes de los ositos cariñositos.
Fue algo fuera de serie, y como dijo mi amigo Rafa Zeballos, si te fuiste de la ciudad huyéndole a la JMJ te perdiste de conocer el Panamá que siempre soñaste.
También tuve el HONOR de ser Casa de Acogida, lo que significa que abrí las puertas de mi casa para 6 jóvenes que no conocía vinieran a quedarse bajo mi techo y cuidado, aun cuando personas cercanas me decían «¿pero tú estás loca? ¡Si no sabes quienes son!», yo recordaba simplemente…
«Porque fui forastero y me recibisteis… enfermo y me atendisteis… En verdad os digo que cuando lo hicisteis con uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí me lo hicisteis»
Mateo 35-40
Al final sólo llegaron cuatro, la verdad que apenas les vi el pelo, salían tipo 8am y llegaban al rededor de las 11pm. Si paraban en algún otro momento querían estar en la piscina. Que siendo franceses por retornar a temperaturas por los 3 grados, se entiende.
Y la parte del versículo que habla de «enfermo» va porque pasamos la aventura de que una se hiciera un esguince la primera noche y así la llevé, coja por la vida de cita médica en la parroquia, a cambiarle el hielo todo el día, y ponerle el Netflix en francés para que no se aburriera de tanta sopa de techo.
Pero como esos chicos venían en el nombre del Señor pues se le hizo el milagrito y después de un día de reposo pudo seguir sus actividades con su vendaje y un bastón de madera estilo Charlie Chaplin de la casa de mi madre.
Y ahora si voy contarte esa historia más intima durante esta JMJ Panamá, más mía, una historia que sólo ocurrió dentro de mí aunque hubiera cientos de miles de personas alrededor como te mencioné al principio.
Te comparto hoy como cuando fui diagnosticada de cáncer no quería ir a la iglesia y no quería ir ni a una misa.
No quería saber de rosarios, ni novenas ni grupos de oración.
Se me levantaba un miedo.
Miedo a eso de pensar que “todo lo que queda es rezar”. Miedo a que me dijeran que las posibilidades quedan pendiendo de un milagro.
Para una persona como yo que necesito saber qué hay un plan, una alternativa, o algo que YO pueda hacer, me superaba y me apretaba el pecho todo lo que viniera alineado con “lo que te queda es el poder de la oración”.
Así que extrañamente hice un amarre mental que ponerme a rezar o en ritos de oración, que aferrarme Ave Marías y Padre Nuestros o prender velas era igual que darme por vencida y dejar caer la espada frente al dragón.
Era como si eso equivaliera a dejarme caer, abatida en mis recursos, en mis ganas y en mi propia capacidad de luchar.
No yo. Yo iba a dar sablazos sin parar, yo iba a dar la pelea de pie hasta verlo caer mientras lo miraba a los ojos sin pestañear.
Y lo digo consciente de que estar en las oraciones y las intenciones de tantas personas hizo una enorme diferencia y estoy segura fueron parte de mi proceso de sanación.
Pero si yo lo hacía, me hubiera derrumbado por completo.
Soy católica, creyente, practicante y defensora de mi fe y de mi Iglesia.
Y aún cuando en los últimos años mi fe y mi espiritualidad han crecido hasta la estratosfera y mi convicción de un Dios y su fuerza es más fuerte que nunca, tengo que reconocer que a partir de entonces me alejé un poco de la iglesia como tal y sus rituales.
Qué quieres que te diga… Me dio miedo.
Desandé un camino que me llamaba pero al cual sólo mirarlo volvía a apretarse mi estómago y a faltarme el aire.
Ya sé. Boba yo que necesito sentir que lo tengo todo medido y controlado cuando el Señor me ha demostrado que todo es posible porque El me lo susurró un día “Yo te sostengo”.
Fíjate que mi mantra cuando entro en dudas o esos miedos que nos abordan a todos es “el Señor es mi Pastor nada me falta”, sólo para mencionarte como no existe duda alguna sobre mi fe.
Y así es como el mismo día en que comenzó la JMJ Panamá pude decir «ha sido un gran día para mí».
Un día en que dije sí a mi camino y mi retorno al gozo de mi Iglesia.
Y cómo no cuando Dios te trae la #jmjpanama2019 a tu ciudad y la Virgen que ha sido una constante en tu vida sale de Fátima a esperarnos en el Parque Omar.
Me preguntaba esa tarde ¿Qué más podemos necesitar los católicos de Panamá para sentir que Dios nos está tocando y viniendo a nuestro encuentro?
¡Ah, sí! Que viniera en Papa, pero ya él llegaba mañana.
Antes aun de que llegara el Papa a Panamá ya yo podía decir que estaba feliz de vivir la JMJ, de tener peregrinos en casa y de ser peregrina también.
Fue muy emocionante que mi madre, como Ministro de la Iglesia, pudiera darme la comunión ese día.
Después de ese primer día tan entrañable ya todo fue desbordarme en vivir la JMJ.
Cuando ví al Papa en su recorrido me emocioné hasta las lágrimas.
Así continué cada día caminando media ciudad como en la Inauguración oficial con el Papa encontrándome en el camino amigas como Peggy y Mereli, o Chela, Nelly y Gracielita que son casi como familia ya.
Contagiada de una alegría compartida y una multitud que celebraba y alababa junta en su propio idioma y bajo su bandera pero unidos en la misma fe.
Fue hermoso.
También tengo que decir que me quedó claro porque es la Jornada Mundial de la JUVENTUD.
Vamos, yo hice una tercera parte de lo que hacían esos peregrinos y un día antes de terminar estaba tan agotada que no recordaba ni como me llamaba, y yo dormí en el hotel de Santa María la noche antes de la misa de clausura, no en el campo, por más que me levante a las 3:00 am para estar caminando a las 4am, no quiero ni imaginar como estaban esos chicos.
Definitivamente: «Juventud, divino tesoro»
Pues ya ves, esta JMJ Panamá para mi tuvo mucho de dar, acoger, recibir, reconectar, expanderme, alegrarme, ha habido risas, lágrimas, fe, oración, alabanza y bendiciones.
Fueron 5 días intensos de una experiencia inigualable y ha sido un regalo vivirlo en Panamá y poder vivirlo de tantas maneras.
Sin importar credo o convicción todos los corazones de quienes estuvieron allí fueron tocados y solo mencionar el evento levanta enormes sonrisas en los rostros de quienes vivieron una tremenda experiencia espiritual o, como poco, conocieron un Panamá a todo dar.
Espero que si no estuviste hayas podido llevarte un pantallazo de lo fue pero, sobretodo, este escrito es para compartirte como la vida es mucho más hermosa cuando estamos abiertos a dar y como la buena energía se contagia.
Te invito a que busques actividades y tribus que te llenen de alegría de la buena y alimenten el alma, a que seas la mano amiga con el desconocido siempre y a que conectes con tu espiritualidad de la manera en que tú la vivas.
Eso es lo que yo más me llevo de esta JMJ Panamá.
Y tú ¿viviste la JMJ? ¿Qué es lo que más te llegó de esos días y lo que te llevas de esta experiencia?
Me encantará saber de tu vivencia y tu opinión, porque los comentarios los leo y contesto toditos.
Sí aun no eres parte de mi tribu querida te invito a que lo seas subscribiste a la pagina bajando mi libro de regalo.
Este año vienen muchos recursos sólo para quienes pertenecen a la tribu y me encantará compartimos contigo.
Un abrazo, p.-
Hola!!!
Me encanto y me siento totalmente identificada!
Pase por las tres etapas JMJ
Resistencia
Hola Elvira que lindo que hayas vivido esa Panamá maravillosa y esa renovación en la fe que como digo es un llamado a que conoectes con tu espiritualidad y Dios, a através de la religión o rituales con los que te sientas mas identificados. Totalmente de acuerdo que fue una maravilla y somos un recipiente de bendiciones adicionales, un abrazo y gracias por compartiremos, p.-
Millón de gracias por este escrito.
hola Rocío, muchas gracias a ti por leerlo y también por comentarme, un abrazo, p.-
Fueron momentos en donde el cansancio no existía, no sé como le haciamos todos tuvimos que caminar, pero no sentí miedo ni dolor, sólo alegría y satisfacción. gracias Papa Francisco.
Tienes razón el cansancio no se sintió, uno caminaba y caminaba en la mejor tónica distancias que en otra situación hubiéramos dicho ¿quede? ¡jamas!Hay energías que contagian y esta visita ha sido fuera de serie. Gracias por compartirme tu experiencia, un abrazo, p.-
Que lindo testimonio, gracias por compartir, especialmente para mí, que no pude vivir la JMJ como me hubiera gustado por encontrarme enferma (cáncer). Me había ofrecido para recibir a 4 peregrinos pero mi salud no me lo permitió. No importa, Dios sabe que en el fondo de mi corazón acogí a cada uno de los peregrinos. Yo también apoyé la JMJ desde el principio, porque las sigo desde Colonia, Alemania, y se cómo estás están organizadas desde el Vaticano y el país sede conjuntamente con ellos implementa la organización. Sabía muy bien, que la ciudad no iba a colapsar simplemente porque ninguna ciudad sede ha colapsado hasta ahora, y eso que la jmj en Manila sigue teniendo el record, casi 5 millones de personas, si los filipinos pudieron por qué, no nosotros? Con todo y que no pude salir, aún así me di una escadita y pude ver al Papa, aunque a pantallazo pero lo vi!! Le grité oro por ti Francisco y quiero pensar que el me escuchó, sino, yo sigo orando por el. Se respiraba amor en Panamá, yo vivo en Clayton y los peregrinos caminaban de aquí para allá, uno los saludaba y ellos feliices. Solo le pido a Dios que luego de pasada la JMJ no nos olvidemos de todo el amor, esperanza, hermandad que vivimos en esos días y continuemos así, cómo nos comportamos en JMJ, cómo dijo nuestro Papa, un pueblo noble. Disculpa si me extendí, yo también me emociono con la JMJ, ya me suscribí, un abrazo y y beso
Hola Ingrid, me encanta que me cuentes todo lo que viviste! Vivir la JMJ ha sido para quien muy especial y como dices el ambiente fue muy especial de cordialidad y convivencia que también espero que nos demuestre que somos capaces de vivir y lo prolonguemos. Lamento escuchar que estés peleando el dragón, espero que le estés dando la lucha necesaria y pronto también sea para ti una historia de tu pasado.
Un abrazo, p.-
Hola Paola… excelente aporte al compartir tu experiencia de Vida… admiro tu Honestidad y Sinceridad al expresarte… eso refleja mucho la Transparencia de tu Alma… reflejas mucha Luz en tus palabras y a la vez carácter… tienes una muy Bella personalidad. Y al compartir tu experiencia con nosotros incentivas a despertar conciencias muchas veces apagadas por las circunstancias personales que a cada uno nos ha tocado Vivir. Sí definitivamente celebrar la JMJ en Panamá ha sido y es la Bendición más Grande que hemos recibido en mucho tiempo. Sacó lo mejor de este pueblo Noble. Lo cual debemos cuidar como una Vela encendida y no dejarla apagar en el Tiempo. En ese sentido no pude asistir a los eventos físicamente. Los seguí como pude por la TV. Pero igual tuve una experiencia personal espiritual… a tres semanas antes de iniciar la JMJ. Lo cual estoy desarrollando actualmente como un proyecto de Vida (Promoviendo Valores Familiares en la Fe). Si puedes en Youtube buscas «La Fórmula Perfecta de Dios», Es un Video Musical Promocional del Proyecto que actualmente está en desarrollo. Así que en resumen la JMJ marcó positivamente mi Vida y la de mi Familia. Y pronto sabrás un poquito más de este hermoso proyecto. Gracias Mil por tu Amistad y el tomarnos en cuenta. Eres una persona muy Valiosa. Desde acá un cálido Abrazo Paola. Emanuel Andrews te escribe desde Colón.
Hola Emanuel gracias por tus palabras que bueno que te hayas sentido también reflejado y la JMJ te haya traído un sentido y proyecto
Lo buscaré en YouTube
Un abrazo, p.-
Me encantó tu artículo Paola y me sentí identificada contigo como siempre. Esperé la JMJ con mucho entusiasmo y así mismo la viví gracias a Dios. Me quedé esperando mis peregrinos, pero pude conversar con muchos y hasta darles ride cada vez que los veía por ahí huyéndole al sol. Fui a todas las actividades menos el viacrusis, pero lo vi por TV. Vi a la Virgen en la Parroquia María Auxiliadora del Colegio Don Bosco y fue hermoso, pero luego pude ir al Parque Omar y allí se sentía un ambiente tan, pero tan místico que realmente tocó mi corazón. Básicamente corretié al Papa hasta que pude verlo cerquita y mirando hacia mi.. Logré ver esa mirada genuinamente dulce y a la vez pícara y cariñosa. Qué te puedo decir …. estallé en lágrimas y cada vez que recuerdo ese instante lo revivo como ese día a la salida de la Catedral. Por primera vez en mi vida acampé en el Metro Park y fue toda una experiencia. Amé la JMJ y todo lo bueno que nos trabajo. Panamá es un país pequeño, pero tenemos un corazón enorme y así mismo nuestras bendiciones. La visita del Papa y tantos peregrinos y nosotros los panameños unidos en oración y buscando de Dios sólo puede traer cosas buenas …. y mira hoy hasta ganamos el clásico de beisball del Caribe! 🙂
Katia cuando me alegra saber que le sacaste el jugo a todo dar y que viviste la JMJ a full.
Es una experiencia inigualable y que no volverá a repetirse.
Igual que tú me siento feliz de haberla vivido y participado en todo.
Te mando un gran abrazo, p.-
La jmj fue increible mi hija desde los 2 años le diagnosticsron un tumor cerebral a sis 16 todavia estamos batallando y a mi me paso lo mismo q a ti creo se q Dios existe esrube 6 años en un colegio de monjas y la enfermedad de mi hija hizo q yo me apartara no dejer de creer pero si me aparte de la.iglesia, yi queria q fuera peregrina para q vivera esa experiencia pero el papa no quizo y yo a escondida la meti como voluntaria para q estuviera y viviera un poco de.cerca fue voluntaria en la iglesia pero bueno participo la lleve a todo lo que pude caminamos como nunca y al final el.papa me dio las gracias por haber estado con ella.
Amanda que misteriosos son los caminos del Señor cierto?
Espero que el dragón caiga y que lindo que hayas sentido como yo un nuevo llamado a nuestra iglesia.
Gracias por compartirme tu linda historia, un abrazo, p.-
Buenas tardes Paola felicidades y belleza su escrito.
Tuve la dicha de ser la delegada de acogida de mi parroquia. Compartir con peregrinos antes de que lleguen, emocion cuando los recibes y ya te llaman por tu nombre. Fue tanto el trabajo dia y noche que solo regresaba a mi casa tipo 4 am solo a bañarme y regresar para la parroquia, que no tuve oportunidad de ir a la cinta costera ni al parque Omar pero la emocion de servir y recibir a cada peregrino era una alegría inmensa, solo pude ir metropark la noche de la vigilia!! Fue un encuentro lindisimo con Jesus Sacramentado, tuve la dicha de ir a despedir al Santo Padre al aeropuerto junto con la delegacion de mi parroquia. Llore mas que una Magdalena, momentos de emocion, de paz, la felicidad de ver a las familias dispuesto apoyar y acoger un peregrino despues que nos costo por 2 años buscar casas y todo era negativo, personas que se burlaban de mi, por mi hijo de 12 años y yo estar 100 por.ciento en la JMJ pero Dios es grande y misericordioso que todo salio bien y cada peregrino que todavia me escriben de Ecuador, Argentina, Canada, México, Costa Rica, Honduras, Guatemala, España agradecen tanto la hospitalidad que se les dio, comparten fotos de sus familias para que aca los conozcan y algo muy bonito que dijo la delegacion de España nos quedamos con la humildad que tienen y nos toca aprender mucho en España de las familias en Panamá. Gracias , JMJ 2019 por siempre en mi corazón, una experiencia maravillosa.
Hola Yelissa, como me alegra ver que viviste esta JMJ de una manera inolvidable también. un Abrazo enorme, una experiencia por siempre grabada en nuestros corazones, p.-
Hola Yelissa que bueno que hayas vivido como yo tan profunda y activamente la JMJ, un experiencia por siempre grabada en nuestros corazones, un abrazo, p.-
Siento que tengo que escribir esto porque beneficiará a algún lector. El domingo de clausura de la JMJ trajeron al Santurario Nacional del Corazón de María una imagen peregrina de la Virgen de Fátima. Yo sentí que tenía que estar frente a esa imagen. Me quedé un rato sentado o arrodillado a cierta distancia de ella, muchas personas pasaban en fila para estar unos momentos frente a la imagen, Sentí que la Virgen me comunicó que me daba un rosario llamado «rosario de la alegría». Al día siguiente lo busqué en google y, efectivamente, existe un rosario llamado rosario de la alegría, también llamado rosario seráfico, rosario franciscano o rosario de las siete alegrías. Ese rosario tiene 7 decenas de misterios que corresponden a las siete alegrías de la Virgen María: La anunciación, la visita a Santa Isabel, el nacimiento de Jesús, la adoración de los magos, el niño Jesús encontrado en el Templo, la resurrección de Jesús, y la asunción y coronación de María en el cielo. Se lo dije a alguien que encargó la elaboración de 2 de esos rosarios (uno para mí). Espero tener pronto un rosario físico de la alegría para rezarlo. En internet está la hermosa historia de ese rosario.
Hola! que conmovedor tu comentario, de verdad muchas gracias por compartir tu experiencia, yo soy la primera lectora en beneficiarse de lo que escribes y las «dioscidencias» de la vida y la Virgen. un abrazo, p.-