Aunque esta es una noticia que Darío y yo ya sabíamos desde hace unos meses, lo habíamos mantenido sólo entre nosotros hasta que decidimos hacerlo familiar en el cumpleaños de mi madre. Para agasajarla por su cumple fuimos todos a cenar delicioso a La Chesa, donde David nos mandó preparar un menú especial y nos tuvo las copa llenas toda la noche.
Estando toda la familia reunida Darío y yo sacamos un papelito, lo que parecía ser un certificado y levantó momentáneamente quejas de mis hermanas. Pero no, era un regalo que no se podía dividir con ellas: La ecografía de tres meses de nuestro hijo-a que fue encargado en las Las Ventas!!
Sip, un nuevo embarazo, Darío y yo estamos felices, aunque al mismo tiempo yo estoy asustadísima. ¿Será niño o niña? ¿Cómo manejaremos a Mar para que no se sienta desplazada? ¿Se puede querer igual a dos hijos? ¿Cómo se organiza uno con dos niños? ¿Cómo se hace para no desaparecer detrás de dos hijos pequeños? ¿Cómo mover a Mar de cuarto sin que se sienta que le toca ceder su vida? ¿Qué enfermera contratar y por cuanto tiempo? ¿Cómo vamos a hacer por las noches? Aaaahhhhh….. estoy más nerviosa que con el primero, probablemente porque en esta vuelta ya se que ser madre tiene muchas bellezas pero la maternidad es muy dura, y los primeros meses más!
Bueno, aquí estamos, este porotito nacerá a mediados de junio del 2011….
Por lo visto esa velita que prendimos con Mar en Torre Ciudad fue un mensaje directo y expedito…
Y además esta barriguita ya no podía seguir disimulandose tan fácil…