No seremos aún como la Semana de la Moda de Nueva York o París pero ¡no le hacemos los mandados a nadie! Y, ¿Qué hago yo en un evento como este? Pues asombrarme que de toda la movida de la moda que está ocurriendo en nuestro patio.
Tengo que decir que la organización se ha fajado el evento, ha evolucionado y te encuentras con un evento muy bien puesto, con presencia de medios, boutiques y diseñadores que le han puesto ganas y esmero de estar a la altura de los estándares de este evento que cada vez tiene más importancia internacional y se destaca como el más sobresaliente de Centroamérica.
El jueves en la noche fui con Peggy Ortiz a ver los desfiles del bloque de las 7pm. Ella, que tiene la boutique NEXT y vive de la moda, y yo, que a estas alturas tengo muy claro lo que me gusta y lo que me pondría o no, discrepábamos en ciertos modelos. «¡Eso me gusta!», «No, Paola, eso no se vende«, «Y ¡ese! ¡ese está estupendo!«, «No, Paolita, eso sólo te lo pones tú, ese que viene sí se vende«, «¿ese?» a veces «¡Eso está horrible!» y ahí sí coincidíamos en alguno que otro…
La pasarela a la que asistimos era a beneficio de la Juventud de Casa Esperanza y estuvo de lo más concurrida, gracias a que nos reservaron puestos en primer fila pudimos apreciar muy bien toda la presentación, y toda la concurrencia.
Ahí estaban expertos en moda como Miguel Herrera o María Sofía Velásquez, gente de los medios como Paty Aramburu de Couture (publicación oficial del evento) o Gabo de Hip, compradores y muchas caras conocidas. Me llamó la atención una fila de chicos -que no deberían de tener más de 22 cada uno- vestidos, algo exageradamente trendy, y pensé ¿serán estos los nuevos fashion bloggers? ¡menos mal entonces que yo soy una mommie-blogger!
De lo que vi me gustó mucho toda la colección de Renata Lozano (Colombia) donde había creatividad, coherencia y calidad y que yo me pondría cualquiera de sus piezas hoy, mañana y en diez años. Hubo otras que no me pondría pero se podía apreciar lo mismo. Y hubo un par que me parecieron sin pies ni cabeza y que erraban en algo tan primordial como la confección. En un show como éste que las costuras sean de mala calidad lo considero ¡imperdonable!
Me pareció de mucha calidad, y que se puede poner aquí o en Saks 5th Ave con la cabeza bien alta, la colección de Michelle Nassan (Panamá). Muy originales las joyas de cabeza de Melina Typaldos y un show, con todas las características de hacer show impactante, la colección de David Vélez.
Las cosas como son, yo no sigo mucho las tendencias. Como ya dije a estas alturas de mi vida sé lo que me gusta y lo que no, lo que me queda bien y lo que, por más de moda de esté, no. También soy de las que reciclo mi ropa por lo menos un buen par de años. Aun me pongo piezas que he comprado hace más de cinco años. En fin, que suelo ser en parte bastante clásica pero me gustan las piezas originales (a fin de cuentas me casé de rojo), y me parece muy interesante cualquier movida que sea expresión de creatividad y valoro el esfuerzo y el coraje que hay detrás de cada exposición.
Hoy termina FWP2013 así que para los que les interesa ver en un sólo lugar lo que se lleva y las nuevas tendencia les recomiendo dar una pasada. La entrada general está a $5.- y si van a ver pasarela (en el salón Mercedes Benz que está muy bien montado) son $40.- y ojo ¡que no aceptan tarjeta de crédito para la entrada!
En fin, que es una buena experiencia y que hay que aprovechar que un evento así se presente en Panamá. De veras mis felicitaciones a los organizadores, Physical, y a los que se han dejado las pestañas para que estos tres días de moda fueran tan notables.